Es muy compasivo y solidario. Sus grandes oídos escuchan sonidos y pensamientos, una de sus notorias virtudes.
Existen objetos que le atraen mocho y uno de ellos son las lupas, las cuales ocupa para verificar sus interpretaciones. Se le debe regalar dulces, vino tinto y semillas y si se quiere contar con su intervención pronta, colocar cerca de él cuarzos transparentes para que pueda proyectar sus señales hasta donde se encuentran sus protegidos, colocarlo en donde se le pueda mirar con frecuencia y saludarlo cada vez que se le vea. También le gustan mucho las plantas, se pueden ofrecer a él varias y colocarlos cerca.
Como le gustan las estrellas y la luna por las noches se puede colocar cerca de una ventana donde pueda admirar su hermosura.
A las personas que lo adoptan les dará oportunidades para realizar sus proyectos, además de que escucha sus emociones, las cuales traduce como consejos, aleja las depresiones, alza la espiritualidad y favorece los principios morales de sus dueños.