Este troll protegerá siempre a su dueño de malas vibraciones y nunca atentará contra la seguridad de quienes le protegen, ni de su patrimonio. Es un excelente guardián, puesto que aleja malas entidades e intrusos. Como ofrenda se le puede colocar a su alrededor muchas dulces, esto hará que se sienta complacido y atento a las peticiones que se le hagan. Este mágico ser será el ideal para que se encuentre en el cuarto de los niños.
Es importante mencionar que lo único que no se debe hacer es colocar objetos de cristal o vidrio, ya que seguramente los tirara. Pero si se colocan junto a Bilbo juegos de equilibrio móviles, se lograra que mantenga la atención fija y se olvide de las travesuras.
Este troll es la represtación del vigor y vitalidad de la fase infantil de todos los seres humanos. Todas sus acciones las realiza con su inigualable entusiasmo que es inagotable. Nunca descansa, ni se da un momento de reposo, el tiempo no existe para el, es incansable. Para lo único que en ocasiones se detiene será para pensar y planear muy bien todas sus ocurrencias. Le gusta mucho jugar con los animales, a los que eventualmente molesta y quienes luego le corretean, lo cual le sirve de ejercicio.
Le gusta mucho cuidar a los niños y evita que los mayores o sus compañeros de juegos los inciten a malos actos o pensamientos. Alejan las vibraciones negativas y colocan algún tipo de escudo para que personas no gratas no permanezcan mucho tiempo en la casa. Expulsa del interior del hogar insectos ponzoñosos, alimañas y roedores. Será de gran ayuda para protección en todos los sentidos, contra robos, incendios, malas compañías y brinda seguridad y confianza a los niños que son tímidos y débiles de carácter. A los adultos nos ayuda para que aflore nuestra sencillez y sensibilidad del niño que todos llevamos en nuestro interior y que en ocasiones se nos olvida que el ser de esta manera nos hará recobrar y reconocer lo que es la verdadero felicidad y alegría.